miércoles, enero 04, 2006

Pues sí, lo he dejado!

Aún a riesgo de arrepentirme enormemente de ello, empecé el año con mi "buen" propósito de dejar de fumar. En primer lugar, esto no quiere decir que de vez en cuando no me eche alguno para el pecho por lo bien que lo hubiera hecho.

Teniendo esto claro, os puedo decir que no lo dejo por la presión mediática a la que estamos supeditados en esos días los fumadores (todavía me considero uno de vosotros, eh?). Que si no se va a poder fumar aquí, que si no se va a poder fumar allá, que si la abuela fuma...

En fin que ahora pretenderán que limpiemos las aceras de los cigarrillos que los currantes ahora se tienen que echar fuera de la oficina, ja!

Esta visto que estamos perseguidos por todos lados, pero lo único que quiero decir es que si tan malo es el tabaco, que lo prohíban como cualquier droga. Después claro está, de prohibir de igual forma, el alcohol, los coches y el matrimonio, ya que últimamente parece que estén causando más muertos que el tan denostado vicio humeante.

Lo dicho que lo dejo, pero ¡no por gusto, sino por susto!

GuR!